Lamine Yamal, estrella del FC Barcelona, heredó este miércoles 16 de julio el icónico número 10 del club azulgrana, que fue usado anteriormente por leyendas como Lionel Messi o Diego Maradona.
Lamine llevará el número 10, un símbolo en la historia del fútbol y una máquina de generar beneficios para un Barcelona que espera elevar todavía más el poder mediático de su nueva gallina de los huevos de oro.
¿Qué dijo el Barcelona de Lamine Yamal?
«Renovar con el Barça hasta el 2031 es un gran paso, el principio de un camino que espero que sea muy largo. Es un sueño desde pequeño y estoy muy feliz. mi familia y yo somos muy felices. El Barça es mi vida, mi casa. Estoy aquí desde los siete años», afirmó Lamine Yamal en la rueda de prensa en la que se presentó el acuerdo con el Barcelona.
El joven extremo se mostró radiante en el acto de una renovación que se acordó hace más de un mes, al que llegó esta vez con toda su familia y que ligará al jugador con la entidad que preside Joan Laporta de momento seis años más. Era la operación más esperada por el barcelonismo y también para el jugador, que pasará a percibir la friolera de 15 millones de euros por temporada, una cifra nunca antes vista para un futbolista de su edad.
Y es que la repercusión de Lamine Yamal ha ido creciendo a cada paso que ha dado desde que debutara hace dos temporadas. Desde entonces, ha quemado todas las etapas. Ha disputado 106 partidos con el primer equipo, en los que ha marcado 25 goles y ha repartido 29 asistencias, y ha maravillado con la selección española hasta el punto de ser clave en la consecución de la tercera Eurocopa.
Su irrupción no solo ha sido futbolística, sino que ha servido para otorgar al Barcelona un nuevo impulso mediático gracias a un jugador que ya ha llevado a cabo con la marca que le patrocina giras en China siendo menor de edad o que posee en Instagram más de 36 millones de seguidores.
Tras los pasos de Messi
La renovación tenía también oculta una «sorpresa» que ya era un secreto a voces. Tras la marcha de Ansu Fati al Mónaco, la camiseta con el 10 quedaba libre y era una oportunidad de oro para que el Barça se lo otorgara a su nueva estrella. «Soñaba con debutar en el Barça y ahora llevo el 10, algo con lo que todo niño nacido en Barcelona ha soñado.
«Messi ha hecho su camino y yo voy a hacer el mío. Daré el máximo para hacer felices a todos», aseguró Lamine Yamal, sabedor de la responsabilidad de asumir un número que ya lucieron Maradona, Rivaldo, Ronaldinho o Messi, jugador con el que se le compara de forma constante.
El argentino es un referente para Lamine, que no solo llevará su mítico dorsal, sino que también ha firmado un jugoso patrocinio para la próxima década con la marca Adidas, la misma que lleva toda su carrera con el hoy jugador del Inter Miami. Y es que Lamine es el nuevo Mesías, un jugador que ya se ha asegurado un futuro de oro, al menos en lo económico.
No entra en polémicas sobre la fiesta
Lamine Yamal acapara focos dentro del terreno de juego y también lo hace fuera. El acto de renovación vino marcado por una semana en la que el jugador celebró su 18 cumpleaños con una fiesta multitudinaria en la que aparecieron infinidad de amigos y artistas, entre los que se encontraban personas que sufren enanismo.
Su contratación ha levantado ampollas y la Asociación de Personas con Acondroplasia y Otras Displasias Esqueléticas con Enanismo (ADEE) ha denunciado al jugador, algo sobre lo que Lamine no quiso entrar. «Yo juego para el Barça, pero cuando estoy fuera de la Ciutat Esportiva disfruto de mi vida y ya está», concluyó sin detenerse en un asunto que ha molestado incluso al Gobierno.
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