Max Verstappen de Red Bull Racing, habló en conferencia de prensa junto a Lando Norris y Oscar Piastri, previa al GP de Abu Dhabi, última carrera de la temporada de la F1.
Hay dos motivos: uno, principal, porque el tetracampeón es así. El otro, sin dudas, es que la batalla psicológica tiene un peso enorme en la pelea. Especialmente por tener enfrente dos pilotos novatos en estas lides y con uno de los dos, justamente el que lidera, que evidenció varias veces en su carrera que la mentalidad es la parte más endeble que tiene.
Verstappen llega con 12 puntos de desventaja con respecto a Norris y cuatro más que Piastri. La cuenta más clara es que si Max gana será campeón siempre que el inglés no termine en el podio. Después hay más combinaciones, pero para el británico terminar entre los tres será suficiente para celebrar su primera corona.
Los pilotos de McLaren vienen de sufrir una bofetada fuerte en Qatar, tras el error de estrategia del team de no mandarlos a boxes con el auto de seguridad en pista. Así, el tetracampeón se llevó un éxito que era impensado y lo metió de lleno en la batalla final.
En el arranque de la conferencia de prensa, les preguntaron a los tres pilotos cómo habían vivido estos días posteriores a la cita de Lusail, antes de llegar a la gran batalla final. “Nada cambia, solo hicimos algunos análisis del fin de semana pasado, porque claramente no nos fue bien, analizamos los errores que cometimos y qué podríamos mejorar.
“Es normal que lo estudiemos después del fin de semana. Pero nada cambia para todos en el equipo, solo tenemos más ilusión”, dijo Norris.
Cuando llegó el momento de Max… “Pasé tiempo con mi hija, trabajé para el equipo de GT3 del año que viene, planifiqué mi equipo de simulación para 2026. Todo muy tranquilo”, dijo y desató la risa en la sala de conferencias.
Un rato después, consultaron a los pilotos sobre si para el fin de semana de Abu Dhabi tenían la compañía de sus padres ante la chance de una conquista. “Cada año invito a mis amigos al cierre de la temporada porque es importante tener cerca a mis amigos que me apoyan siempre en todos los momentos, gane o pierda. Mis padres vinieron a varias carreras y a las últimas siempre van. Así que gana o pierda es bueno tenerlos siempre”, contestó Norris.
Y llegó el momento de Max: “Mis padres no están acá. Mi papá está en un rally en África y mi mamá, tampoco. Es que en realidad no tenía planeado llegar al final de la temporada peleando por el título, después de Zandvoort cancelamos todo. Mi mamá debe estar feliz en casa con los perros. Igual lo pueden ver por TV”.
La cancelación del plan tras la carrera de Países Bajos es porque tras esa cita (la 15ª), Max estaba a ¡104 puntos del líder, Piastri! Después de la vuelta a las pistas tras el parón del verano boreal, no se bajó del podio y ganó cinco carreras.
La arremetida le permitió llegar al cierre con chances. Consultado sobre sus posibilidades, dijo: “Estoy muy tranquilo, no tengo nada que perder. Estoy disfrutando estar aquí. Disfruté la segunda mitad de la temporada, trabajando con el equipo y haber podido superar los momentos difíciles. Así que simplemente estar sentado acá y luchando por el título es genial. Solo trataré de tener un buen fin de semana, pero no está bajo mi control”.
